Mostrando entradas con la etiqueta calzado infantil. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta calzado infantil. Mostrar todas las entradas

jueves, 5 de septiembre de 2013

LAS BOTAS NO SON PARA EL INVIERNO

Al cumplir los 18meses nos tocaba revisión con nuestras queridas enfermera y pediatra (y el queridas va sin recochineo,  tenemos suerte y tenemos un centro de salud que encaja con nosotros).

Medir,  pesar (terror en esta parte,  mi pequeño sigue siendo un menudito), preguntas rutinarias....salvo una:
"¿Ya saben estos papás que este invierno no van a comprar botas?"

Lo primero que pensé fue que, después de un invierno tan largo claro, vendrá un invierno seco jajajaja no vi más allá de sus palabras. Es más en mi cabeza estaba visualizando una botas monisimas, eso si, para mí. 

No, estaba claro que no iban por ahí los tiros. La pediatra se explicó: "no debéis comprarle botas, es muy común que el calzado infantil se asemeje al del adulto y es un error. Estos niños necesitan que su tobillo esté libre para ejercitar y fortalecer la articulación,  así que comprar calzado apropiado pero tipo zapato."
Llegué a casa y , claro,  me puse a investigar.

Yo confieso que poco calzado he comprado,  en casa solemos ir descalzos y para la escuela mientras no caminaba le llevaba unas zapatillas blanditas simplemente para que no se enfriara mucho. Como empezó a dar pasitos algo tarde con respecto a las estadísticas este tema me preocupaba más bien poco.
Es cierto que para el verano le había comprado unos zapatitos de una marca que descubrí en ALTERNATIVA, la otra tienda del bebé, BOBUX.


Allá me fui a ver detenidamente la cajita y descubrí en su interior ,  además del típico catálogo,  una cuartilla con las siguientes recomendaciones que desmontan mitos a cerca del calzado infantil:

1. Tobillo:
mito: los niños necesitan soporte y sujeción en los tobillos
verdad: los zapatos con corte bajo permiten fortalecer de manera natural los tobillos.

2. Suela rígida:
mito: las suelas gruesas y resistentes aportan protección y agarre
verdad: las suelas planas y flexibles permiten que el pie se mueva de forma natural

3. Sujeción:
mito: los zapatos tienen que sujetar perfectamente el pie para mejorar el apoyo
verdad: una sujeción ajustable ayuda a que el hueso metatarsiano y los tejidos se derrallosen naturalmente

4. Estructura:
mito: los zapatos necesitan una estructura rígida en la parte superior.
verdad: los zapatos menos rígidos dan al pie libertad de movimiento. 

5. Forma:
mito: los pies de los niños son como los de los adultos pero en pequeño.
verdad: los pies de los niños son distintos de los de los adultos y cambian radicalmente de los 0 a los 5 años.  

6. Espacio para crecer:
mito: los niños necesitan una longitud de media pulgada para que los dedos puedan crecer.
verdad: los niños necesitan una anchura suficiente en los dedos del pie para su correcto desarrollo. 

Sobre el último apartado mi pediatra nos aportó un  truco que comparto con vosotros.  Para elegir la talla apropiada lo mejor es sacar la plantilla interior del zapato para asegurarnos que hay espacio en la puntera y en el ancho.  El pie de nuestro bebé va a crecer de ancho, y estamos acostumbrados a medir sólo el largo.
El uso de un calzado apropiado es muy importante para favorecer el correcto desarrollo del pie y tobillo,  y previene futuros problema en la adolescencia y edad adulta.

Lo ideal es estar descalzos el  mayor tiempo posible( perdamos un poco el miedo al frío en los pies hoy por hoy en casi todos los hogares hay calefacción,  alfombras,  moqueta...) o con calcetines antideslizantes, y usar un buen calzado cuando sea necesario (recuerda que un bebé que no camina no necesita calzarse).
He colgado esta información en el tablón de noticias del aula, para informar a las familias y , así, ayudarles a elegir el mejor calzado para sus hijos. Ya veremos si es efectivo!

Así que ya sabéis,  este invierno ¡sin botas!